El oficial del ejército Claus Michael Pedersen lidera diferentes patrullas del ejército danés en territorio afgano, desactivando minas e intentando alejar al peligro talibán de la población civil. Por su parte, su mujer, tiene que lidiar en el día a día con sus tres hijos y la ausencia del padre de éstos. Abatido por una acusación de crímenes de guerra, Pedersen es retirado de sus servicios y obligado a volver a Dinamarca a enfrentarse en un juicio. En su regreso al hogar, tendrá que someterse a un juicio de gravedad y afrontar las consecuencias de sus actos, tanto para él como para su familia.